Mientras Mohahmar El Gaddafi, el mítico Coronel de la Revolución Verde de los 60, ha sido un suplidor confiable de petróleo y sus derivados para el Hemisferio Occidental, estos últimos 42 años de su accidentado gobierno han pasado como si nada. Se encuentran fijas en nuestros ojos las imágenes del sátrapa seudo-demócrata italiano de Berlusconi, prendado de las brazos del “locato” de Libia en cálidas visitas a su tienda en el desierto, para manosear in-situ sus múltiples y muy prósperos negocios de diversa índole, en el multi-tribal territorio. Ahora “il cavalieri” y sus opulentos camaradas de la UE se lanzan en contra de ese gobierno, el cual ya no le es útil.
Pués bien, se sabe que el poder adquisitivo de los habitantes de ese país es tal que, miles de ellos poseen todo tipo de cámaras y celulares de última generación…¿y cómo es que no han salido al aire las imágenes en Bengassi y otras ciudades de las sangrientas matanzas y el ametrallamiento de manifestaciones; apenas si se ha reportado el video de 2 coroneles de la Fuerza Aérea aterrizando en Malta en sus aviones, luego de desertar y ello sin ofrecer un ángulo fotográfico en que aparezcan las matrículas y así dar certezas periodísticas… que los aviones son libios, nada de eso. Mas bien podemos intuir que todo lo visto hasta ahora tiene el tufo característico de las provocaciones pre-fabricadas de las agencias de inteligencia tanto la CIA de USA, como el C-5 de Gran Bretaña y el MOSSAD israelí; y hoy día se confirma palmariamente el trágico cuan trillado cuento de los 1000 muertos y el ametrallamiento de multitudes, pero con el añadido de novísimas versiones de pilotos aéreos fusilados por negarse a bombardear ciudades y toda una provincia de gran importancia geo-estratégica en manos rebeldes y la inefable figura de familiares cercanos, tales como primos-hermanos, sobrinos o cuñados que se hastiaron del Dictador y se han cuadrado con los aires demócratas del mundo libre.
En días precedentes los medios occidentales dejaron pasar “lisos” a los dictadores de Túnez y Egipto, cómodamente arrellanados en exilios dorados, por allí mismo en los alrededores, sin que aparecieran las mismas personas con fingidas caras de tribulación y de diversos idiomas, clamando desde una fantasmal ONU, que se ponga en cintura al monstruo de Libia. Pero lo que si es inocultable es la no velada intención de todos los países de Europa de aprovecharse del apetecible botín de los inmensos yacimientos de combustibles fósiles. Es la misma estrategia desestabilizadora imperialista de siempre, o sea, ponerle la mano a la Faja Petrolífera del Norte de Africa (Marruecos-Argelia-Libia-Egipto) y del Bolsón de Petróleo del Medio Oriente (Arabia Saudita-Qatar-Yemen-Bahreim-Omán-Kuwait-Irak), a todo ello habría que añadir el “hueso duro” de Irán, que de suyo no es atacable por los medios convencionales de la CIA y el MOSSAD y se mantiene incólume en sus avances.
Todo lo anteriormente explicitado es demasiado caro a las pretensiones de la vieja Europa, incluyendo a la “Perfida Albión” –léase Gran Bretaña- y sus socios trasatlánticos de EEUU, que ratifican su inocultable imagen de ser la zona geográfica del Hemisferio Norte con aspiraciones de ser los nuevos gendarmes del Mundo, mas derrochadores de combustibles de todo tipo y por ende de mas alto consumo de estupefacientes degradantes. Baste ver y leer las declaraciones del Ministro del Exterior Británico, al inicio de las hostilidades en Libia, espetando la burda mentira de que Gaddafi ya estaba en ruta hacia Venezuela, en busca de su congénere Chávez, intentando infructuosamente “matar dos pájaros con la misma bala”. Estamos en presencia de una maquillada, pero burdamente presentada versión de la tesis de las “armas de destrucción masiva en poder de Satán Hussein” en los tiempos de la preparación de la invasión a Irak por parte de EEUU y el policía Bush. El que quiera caer por inocente, como el caso del cándido Comité de la ONU por los Derechos Humanos…que lo haga y asuma su responsabilidad, nosotros cumplimos con el deber de desenmascarar al fariseismo político de los imperialistas de toda laya en donde se encuentren. Así de sencillo.
ESCRIBE : Miles Useche
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